Programa nº 44
Hay quienes buscan el sentido de la vida en los grandes actos, en los momentos que estremecen los cimientos del mundo, en los estallidos deslumbrantes que parecen cambiarlo todo. Sin embargo, quizá el secreto —ese que se esconde detrás de cada respiración, de cada gesto involuntario, de cada silencio compartido— se encuentre en las pequeñas cosas. En lo casi invisible, en lo que se escapa a la mirada que solo está entrenada para lo monumental.
El mundo se ha vuelto experto en ruido. Todo el mundo grita, todos opinan, todos corren. Pero hay un territorio, un refugio secreto, donde las voces bajan y el alma respira. Ese refugio está hecho de pequeños detalles: una luz cálida que entra por la puerta entreabierta, el silencio cómplice de dos que no necesitan hablar, el olor a una comida que nos recuerda que el hogar existe todavía, aunque sea en la memoria.
Las pequeñas cosas no exigen nada. No quieren reconocimiento ni buscan la gloria. Se limitan a estar. Y, sin embargo, sostienen nuestra vida más que los acontecimientos con los que llenamos el currículum. Porque uno no recuerda los grandes discursos, pero sí aquella tarde en la que alguien nos escuchó sin reloj; no recuerda el premio, pero sí la risa que salvó un día difícil.
Dicen por ahí que la felicidad es un estado. Yo creo que es un instante. Un instante frágil, discreto, casi clandestino. Un instante hecho de cosas diminutas que a veces pasan tan cerca que ni las vemos. Pero están ahí, esperando a que bajemos el ritmo, a que miremos con otros ojos.
Y cuando uno, agotado ya de tanto ruido, se detiene… entonces lo pequeño se vuelve grande. Una palabra amable te cambia la jornada. Una caricia te recompone. Un rayo de sol en mitad de la calle te recuerda que no todo está perdido. La belleza, aunque escondida, insiste en aparecer.
Y respecto al amor… que puedo decir sobre el amor. Ese sentimiento del que tanto se habla y tan poco se entiende. El amor, créeme, no vive en los gestos grandiosos. Vive en lo mínimo: en la taza de café que alguien te prepara sin que lo pidas, en la forma en que pronuncian tu nombre, en un abrazo que llega justo cuando uno está a punto de romperse.
Si me permites un consejo... te diré esto: escucha a las pequeñas cosas. Mira donde nadie mira. Ahí está la verdad. Ahí está la vida.
El mundo se ha vuelto experto en ruido. Todo el mundo grita, todos opinan, todos corren. Pero hay un territorio, un refugio secreto, donde las voces bajan y el alma respira. Ese refugio está hecho de pequeños detalles: una luz cálida que entra por la puerta entreabierta, el silencio cómplice de dos que no necesitan hablar, el olor a una comida que nos recuerda que el hogar existe todavía, aunque sea en la memoria.
Las pequeñas cosas no exigen nada. No quieren reconocimiento ni buscan la gloria. Se limitan a estar. Y, sin embargo, sostienen nuestra vida más que los acontecimientos con los que llenamos el currículum. Porque uno no recuerda los grandes discursos, pero sí aquella tarde en la que alguien nos escuchó sin reloj; no recuerda el premio, pero sí la risa que salvó un día difícil.
Dicen por ahí que la felicidad es un estado. Yo creo que es un instante. Un instante frágil, discreto, casi clandestino. Un instante hecho de cosas diminutas que a veces pasan tan cerca que ni las vemos. Pero están ahí, esperando a que bajemos el ritmo, a que miremos con otros ojos.
Y cuando uno, agotado ya de tanto ruido, se detiene… entonces lo pequeño se vuelve grande. Una palabra amable te cambia la jornada. Una caricia te recompone. Un rayo de sol en mitad de la calle te recuerda que no todo está perdido. La belleza, aunque escondida, insiste en aparecer.
Y respecto al amor… que puedo decir sobre el amor. Ese sentimiento del que tanto se habla y tan poco se entiende. El amor, créeme, no vive en los gestos grandiosos. Vive en lo mínimo: en la taza de café que alguien te prepara sin que lo pidas, en la forma en que pronuncian tu nombre, en un abrazo que llega justo cuando uno está a punto de romperse.
Si me permites un consejo... te diré esto: escucha a las pequeñas cosas. Mira donde nadie mira. Ahí está la verdad. Ahí está la vida.
Contenido:
01 - Adrian Berenguer - Little Things
02 - Tsode - TOTUM
03 - Helen Jane Long - Outside
04 - Jurrivh - First Love
05 - Eric Tingstad - Don Juan
06 - Jo Blankerburg - Villanelle
07 - Maria Davis - In Every Way
08 - Ignacio Núñez - La leyenda del contador de estrellas
09 - Lito Vitale Cuarteto - Basta de Fingir
10 - Yanni - Marching Season
01 - Adrian Berenguer - Little Things
02 - Tsode - TOTUM
03 - Helen Jane Long - Outside
04 - Jurrivh - First Love
05 - Eric Tingstad - Don Juan
06 - Jo Blankerburg - Villanelle
07 - Maria Davis - In Every Way
08 - Ignacio Núñez - La leyenda del contador de estrellas
09 - Lito Vitale Cuarteto - Basta de Fingir
10 - Yanni - Marching Season
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